viernes, 24 de julio de 2009

Libido



Libido apareció a finales de los noventas y coloco al Perú en el circuito comercial Rock & Pop de Latinoamerica. Su primer disco "Libido" (1998), trabajo que es un buen equilibrio entre el underground y mainstream, es el mas contundente a nivel rockero (pero sin dejar de lado claro, la cuota melódica tan característica en ellos) y fue la sensacion nacional en ese entonces, muchos ya los catalogaban como "la gran esperanza chola" y fue con su segundo trabajo, el bien pulido "Hembra" (2000) (esta vez editado por una disquera multinacional) que siguiendo la misma linea, confirmo que los Limeños aspiraban a mucho.


Fueron años en donde el movimiento rockero limeño vivió un inusitado auge, auspiciado en gran parte por los éxitos que cosechaba Libido a nivel internacional, pero esa fiebre duro lo que dura el entusiasmo por una chica linda pero terriblemente aburrida. Pasado el vendaval solo unos pocos, pudieron seguir ese difícil camino que significa ser un grupo de rock perteneciente a un país tan terriblemente ignorado a nivel musical como el Perú.


Aunque sus siguientes trabajos: "Pop* Porn" (2002) "Lo Ultimo que hable ayer" (2005) son trabajos menores a comparacion de su primer par y los desnudan finalmente como un grupo Pop sin mayores pretensiones, Libido siguió manteniendo su estirpe de grupo efectivo a nivel de singles, expertos en encandilar a la audiencia con canciones redondas.


Este año Libido regresa con el esperado "Un Nuevo Día", cuyo primer corte "Nadie sabe lo que Vendrá" suena (además de profético con el futuro de la banda) ya muy lejana de aquellas primaverales y sudorosas épocas de "Cicuta" o "Don".


Los ya viejos Libido están de regreso y me da gusto. Pocos actos Pop en el Perú han tenido el respaldo de la gran mayoría, respaldo bien ganado, porque aunque sin llegar a ser una megabanda, nadie puede dudar del talento de los capitaneados por Salim Vera, de no ser así, no serian los únicos sobrevivientes de lo que pudo haber sido la epoca dorada del rock peruano, en volver a adueñarse, tan frescos como lechugas, de los mismos medios que conquistaron a comienzos de siglo.


Nótese la diferencia del ahora y del antes:














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