viernes, 7 de agosto de 2009

Mis Dulces Super 30




# 23: Los Tíos Queridos - Voy a Pintar las Paredes (1969)


Poco después que falleció mi hermano mayor hace 7 años, estaba yo consumido por la tristeza, tratando de dormir en la habitación de mi Madre, ella que durante todo ese trance había mostrado una increíble tranquilidad se encontraba en la otra habitación escuchando radio mientras veía a la calle tras una pequeña ventana, como siempre. Aquella radio era de aquellas dedicadas a difundir temas del recuerdo y ella, de muy buen humor, tarareaba algunas canciones que de seguro le traían muy buenos recuerdos de su juventud.


Durante los 60's a la música en español por estos lares sudamericanos se le denomino "La Nueva Ola" y agrupaba a todos los entusiastas y engominados mozuelos que cantaban y brincaban influenciados en gran parte por la movida "rocanrolera" gringa y británica. Luego se sumaron a ellos los boleristas y baladistas que giraron un poco su estilo para acoplarse a esta corriente que tuvo mucho éxito durante esa década y la siguiente. Dentro de aquel gentío, Los Argentinos de "Los Tíos Queridos" (una versión sudaca de gente tan azucarada como The Archies) brillaron con temas que rebozaban de candor adolescente muy ajeno a estas épocas regetoneras y hablaban del trance de los primeros rompimientos del corazón, todo a ritmo ye-ye claro, como para estar en onda.


Esa mañana, acostado en el cuarto de mi madre y debatiéndome entre dormir y olvidar o mantenerme despierto y llorar, recuerdo que mi ella empezó a cantar con alegría "Voy a Pintar las paredes con tu nombre mi amor..." ese momento nunca lo voy a olvidar en mi vida, la manera en que mi madre acompañaba la canción y la manera tan dulce que repetía "que linda canción" entre estrofa y estrofa contrastaba con lo que estaba viviendo la familia en esos días.


Tal vez en ese momento ella encontró en aquellas canciones algo de felicidad como consuelo a la enorme perdida que debe significar para una madre perder a un hijo. No lo se. Pero me quedo claro una cosa. Es muy común cuando nos sentimos desdichados, buscar en el pasado momentos de felicidad que nos ayuden a soportar y a salir de la pena, quizás porque crecimos con la idea que todo pasado fue feliz y que deseamos que esa felicidad regrese a nuestras vidas... como una nueva ola.

Viejita, feliz cumpleaños.






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